La elección adecuada de un vino es muy importante porque puede realzar los sabores y texturas de los platos, creando una atmósfera sofisticada y elegante.
Aquí dispones de 5 de nuestros consejos de los muchos que se pueden seguir para un buen maridaje.
Elige el vino según el plato:
Los vinos más ligeros y jóvenes suelen maridar mejor con comidas más suaves y delicadas, mientras que los vinos más robustos y de crianza se complementan mejor con platos más intensos.
Considera la acidez:
Si el plato es ácido, busca un vino con acidez similar para que se equilibren entre sí, sin embargo, si el plato es más bien dulce, busca un vino con un punto de acidez para cortar esa dulzura.
Piensa en los taninos:
Los vinos tintos con más taninos suelen maridar mejor con carnes rojas y platos grasos, mientras que los vinos con menos taninos son más adecuados para platos más suaves como pescados o verduras.
No te olvides de la temperatura:
Un vino joven se debe servir ligeramente fresco, mientras que un vino de crianza necesita una temperatura más alta para que se abran sus aromas y sabores.
Y sobre todo experimenta y diviértete:
Al final, el maridaje es una cuestión de gustos, así que no tengas miedo de probar diferentes combinaciones y ver lo que funciona mejor para ti.